viernes, 18 de julio de 2014

Colouring, la terapia anti-estrés favorita de las francesas

O cómo la ciencia ha demostrado los beneficios de pasar tiempo con el Art Therapy.

Colorear ya no es sólo un juego de niños. Las francesas, esas mujeres a las que se les atribuye la capacidad de no engordar y preservar su idiosincrásico je ne sais quoi a través de los siglos, han descubierto los beneficios de pasar un tiempo a solas con Ryan Gosling. O, bueno, no necesariamente con él. Puede ser Cara DelevingneKate Moss o cualquier otro personaje u objeto dibujado cuyo trazo permita ser rellenado con color.

El tradicional pinta y colorea es un tendencia en alza en el país vecino para combatir el estrés de la rutina diaria. Los informes aseguran que, de un tiempo a esta parte, este tipo de libros se venden mejor que los de cocinay la respuesta de las editoriales no se ha hecho esperar, contraatacando con una amplia oferta de cuadernos para colorear dirigidos a los adultos. Especialmente, mujeres.


Colour me good
Es el caso de los Colour me good con personajes famosos, pero también triunfa la inspiración psicodélica de los dibujos tipo caleidoscopio. Como los mandalas, esos círculos con representaciones simbólicas de la religión budista. En esa categoría se encuentra Secret Garden. An Inky Treasure Hunt and Colouring Book de Johanna Basford, un libro al que la editorial francesa añadió anti-stress al título y duplicó las ventas británicas. Otro ejemplo, es el del bestseller 100 Coloriages Anti-Stress con el que la editorial Hachette se introdujo en este mercado. "Hicimos la prueba con él en 2012 y tuvo un éxito instantáneo. Fue amor a primera vista" declaraba Ann Le Meur, responsable de la sección colouring de la editorial al periódico Independent.


Esta fórmula, conocida como Art Therapy es el remedio más inocuo contra el aumento de las crisis de ansiedad y los cuadros de estrés de la sociedad del siglo XXI. "Mantiene tu mente concentrada así que no puedes estar pendiente del teléfono", dice el profesor de psicología y salud Cary Cooper. "Además es adictivo, creativo y relajante".



jueves, 17 de julio de 2014

EL Armario femenino en los años 30 - Exposición Glamour.

Aqui les presento una nota de historia de la moda de los años 30, llena de glamour y estilo. Renace el sofisticado estilo de los años 30. Qué opinan?


El armario femenino de los años treinta, en el que triunfaron diseñadores como Madeleine Vionnet o Coco Chanel, vuelve a la actualidad a través de la exposición “Glamour”, que se cita en el Museo del Traje y el Encaje de Bruselas. (EFE Noticias).

Bruselas (7-2014).- Vestidos de día, de media tarde, de cóctel o de noche, formaban parte de la larga lista que guardaba el armario de las mujeres de la década de los años treinta, donde el código de vestimenta era complicado y variaba en función del momento del día y de sus ocupaciones.
Por primera vez se expone en Bruselas la moda que vestía a las mujeres belgas de aquella década y da conocer sus tendencias y los cambios que sufrió respecto a los años veinte.

Décadas prodigiosas

Los locos años veinte, marcados por la prosperidad económica, dieron lugar a modelos frívolos y extravagantes, donde las mujeres buscaban una figura “unisex”, hasta que estalló la Gran Depresión en 1929 y la sobriedad y la discreta elegancia se impusieron, de acuerdo con los restrictivos tiempos económicos.
 ”‘Glamour’ es el título de esta exposición y se refiere a la sofisticación de la ropa, ya que los vestidos estaban confeccionados con diferentes y complejas piezas”, explicó hoy a Efe la responsable del museo, Caroline Esgain.
La exposición reúne 97 piezas que exhiben ropa interior combinada con los trajes de tarde, ropa deportiva, accesorios, vestidos de novia, ropa infantil o vestidos de noche con vertiginosos escotes en la espalda, todas prendas sofisticadas y llenas de detalles, pero a su vez discretas, en coherencia con los años de crisis económica.

Casas de costura

“Los modelos que componen esta exposición proceden de París, como el modelo de Coco Chanel, que se puede ver en la exposición, el de Madelein Vionnet, Paquin o Worth, y el resto fueron creados por firmas bruselenses, de las que se desconoce sus diseñadores, o son vestidos que llevaban las mujeres de esos años, pero no se sabe cuál es su procedencia”, dijo la responsable del museo.
Bélgica no tenía realmente creadores de moda, como había por ejemplo en París o en Londres, pero “existían casas de costura en Bruselas cuyos directores artísticos iban a París y utilizaban las telas de la ciudad francesa para reproducir las piezas”, explicó.
En Norteamérica, la meca del cine, fue el mayor escaparate de esta moda, donde actrices como Greta Garbo, Marlene Dietrich o Jean Harlow exhibían el glamur hollywoodense, en el que “muchas mujeres, independientemente de su condición, querían verse reflejadas”, dijeron los organizadores de la exposición, abierta hasta el 15 de febrero del próximo año (2015)

“En los años 30 se devuelve toda la anatomía femenina a su posición, los senos reaparecen y se realzan, la cintura se acentúa, así como las caderas gracias a la faja”, agregó Esgain.
Así la ropa íntima, que permitió resaltar las formas naturales de la mujer, podía combinarse según los distintos modelos y ocasiones, como muestra el museo a través de sus piezas e ilustraciones.

Junto a estas novedades, la creación del corte al bies hizo que los vestidos tuvieran mayor movimiento y “permitió que los tejidos se ajustaran al cuerpo”, con lo que se consiguió una “silueta femenina perfecta”, añadió Caroline Esgain